El peso de las piedras

Tengo una piedra en el pecho. Es más grande que los alvéolos y no creo que quiera dejar de crecer. Todavía cabe ahí dentro. La pleura la abraza y la protege con la misma fe que si fuera un bronquio. Mi pecho es una salina por la que decantan barcos encallados. Barcos: la casa de las aves en alta mar. Aves: ermitañas que anidan en mi pecho. Y pican. Pecho: cama de faquir, guarida vacía y oscura. El peso de los barcos. Aves mudas. Yo ya no puedo abrazar, tengo una piedra en el pecho y me cuesta respirar.

Artes 110, 1942. Óleo sobre lienzo. Leonora Carrington (1917-2011). El arte de ser libre. Museo Leonora Carrington.

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