«Jamás hay que dejar apagar el fuego de tu alma, sino avivarlo»
(Vincent Van Gogh)
-Rimas_XXIV: ‘Dos rojas lenguas de fuego’-
Dos rojas lenguas de fuego que, a un mismo tronco enlazadas, se aproximan, y al besarse forman una sola llama; dos notas que del laúd a un tiempo la mano arranca, y en el espacio se encuentran y armoniosas se abrazan; dos olas que vienen juntas a morir sobre una playa y que al romper se coronan con un penacho de plata; dos jirones de vapor que del lago se levantan y al juntarse allá en el cielo forman una nube blanca; dos ideas que al par brotan, dos besos que a un tiempo estallan, dos ecos que se confunden, eso son nuestras dos almas.
Gustavo Adolfo Bécquer
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